Cuento del comerciante y el pescador

Un comerciante dándole la turra a unos pobres indígenes. Epítome del capitalismo
Rescatado de los fondos de internet
Autor: Tony de Mello
 
Enzo, un rico comerciante de Puerto Ayacucho, visita a las comunidades indígenas del alto Orinoco y se horroriza cuando ve a Orawë , indígena yanomami tumbado tranquilamente en su chinchorro ( especie de hamaca) mascando tabaco.
 
--¿ Por qué no sales a pescar?  --Le pregunta Enzo
--Porque ya he pescado bastante hoy --Le contesta Orawë.
--¿ y por qué no pescas más de lo que necesitas? --Insiste el comerciante.
-- ¿ Y qué iba a hacer con ello? --pregunta a su vez el indio.
-- Ganarías más dinero. De ese modo, podrías poner un motor fueraborda en tu canoa. Entonces, podrías llegar lejos en el río y escar más peces. Y así, ganarías lo suficiente para comprar una red de nylon, con la que obtendrías más pesecado y más dinero. Pronto, ganarías para tener dos canoas, y hasta dos motores, y más rápidos... Entonces serías rico como yo.
--¿ Y qué haría entonces? --preguntó de nuevo el indígena.
--Podrías sentarte y disfrutar de la vida --respondió el comerciante.
--¿ Y qué crées que estoy haciendo en este momento? --respondió satisfecho el indio Orawë
 
Este cuento se publicó en la revista Los papelillos de Marx Madera, y un día estuvo publicado en nodo50.org/marxmadera/papelillo.pdf
 
Hoy lo hemos rescatado de este pdf